Peligroso
cuando domina el tirano.
Doblega
al que no quiere obedecer.
Muchos
olvidan llamarse hermanos.
Muchos
olvidan ver al amanecer.
Entonces
se apresa al que sonríe libre.
Porque
la sonrisa del alma es libertad.
Y el
tirano quiere ser el único tigre
Para poder
seguir rugiendo crueldad.
Héroes
duermen en la cama del olvido.
Mueren
las miradas de esperanza.
Entonces
el pensar estará prohibido.
Y el
tirano seguirá recogiendo alabanzas.
Quizá
se pudo haber llamado Inés.
Quizá
se llamó, pero dejó de existir.
Ya no
se sabe en este mundo al revés,
Cuando
naces y cuando empiezas a morir.
Pero siempre
habrá algún curioso.
Que empezará
a buscar lo incierto.
Que pensará
que existe lo hermoso.
Que
caminará aunque sea descubierto.
Yo
quiero caminar hasta ver el resplandor.
¡LIBERTAD!
Para las dos almas de Inés.
Las dos
almas con las que mira el amor,
De quienes
la recuerdan mes tras mes.
La
verdad, duela a quien duela
La
tiranía no puede seguir ilesa
Porque
se pierde a Venezuela
Y las
sonrisas duermen presas.
Por: @TheRed_Shadow
Tus letras han sido forjadas en la calle... Llevan la impronta del dolor que sufren los chamos...
ResponderEliminarUn gran abrazo, poeta.
Gracias hermano. Un fuerte abrazo desde la distancia.
Eliminaraquí estoy de la mano de Carlos ...
ResponderEliminarsangra Venezuela ... amigos que lloran ,
sangre de mi sangre que hace años voló en busca de sueños.. hoy enterrados ... regresan a casa con las manos vacías y la mirada ....... perdina
felicitaciones
No siempre viviremos entre miradas perdidas, habrán miradas encontradas muy pronto. Un abrazo.
EliminarVengo del blog de Carlos Humberto y confirmo sus palabras.
ResponderEliminarUn saludo.
Simplemente hermoso, te felicito sigue escribiendo esos poemas para nosotros q tenemos la inspiración entristecida, por las circunstancias
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