Veo un rostro con sonrisas obligadas.
Latidos que laten en otros lados.
Esperanzas que fueron raptadas.
Sueños sangrando enamorados.
¿Qué es un cuerpo sin corazón?
¿Cómo se detiene la lluvia eterna?
No se ve la letra triste de la canción
Cuando ni siquiera hay luz en la caverna.
Veo que sonríes con sonrisas viejas.
Recicladas de recuerdos del pasado.
Memoria crucificada entre rejas.
Amigos ahora por siempre separados.
¿Cuándo trabajas por felicidad?
Ahora solo trabajas por comida.
Recurres frecuente a la falsedad
Para disimular dos muertes vividas.
En la mesa te sientas tú y tus recuerdos.
Te comen por dentro, tú los comes por fuera.
Y siguen gobernando aquellos cerdos
Que se encargan de que la granja se muera.
Lo único lleno, tus ojos de cascadas.
Deseando un pasado como futuro.
Te delatan tus ojeras marcadas
De las veces que has chocado el muro.
Vacío… ni los sentimientos están llenos.
El amor se come al odio, el odio a la tristeza.
No se avanza, pero igual te ponen frenos.
Solo el vacío, solo un vacío es quien te besa.
No se aprende a olvidar, solo a fingir
Fingir que no éramos quienes fuimos.
Mentir solo para poder existir.
Hacer como si no vivimos lo que vivimos.
Estás lejos de donde realmente estás.
Te llevaste maletas, pero de ti te olvidaste.
Te llevaste la ropa, pero dejaste el alma atrás.
¿Quién eres si a ti te abandonaste?
Soy el vampiro que mordisquea ajos.
Un eterno que se hace viejo.
Alguien que ya se va al trabajo
Y dejará de hablarse al espejo.
